jueves, 6 de agosto de 2009

Coaching



No somos más que lo que sentimos, así es, existen evidencias científicas que argumentan que el cuerpo es una mente inconsciente.

Así que desde esta perspectiva todos los procesos de aprendizaje se aprenden con todo el cuerpo, podríamos poner de ejemplo la atención o la memoria.

La nueva neurociencia ha encontrado diferencias entre los átomos moléculas y macromoléculas que trabajan a nivel celular interno, como un cerebro pensante, a diferencia de los ojos, oídos, olfato etc.. que actúan como órganos del sentido, y de ahí la percepción.

De tal manera que podríamos decir que el enunciado de Descartes “Pienso, luego existo” podría ser tema de discusión, debido a las nuevas evidencias.

Según Candace Pert, la mente, el espíritu y las emociones están unificadas en el cuerpo en un sistema inteligente que dirige lo que llamamos vida.

Podríamos decir que a nivel corporalidad es posible predecir la postura que adoptaran las personas, si sabemos en qué estados emocionales se encuentran.

Es evidente que cuando hay un cambio de ánimo también nuestras posturas corporales cambian. Y al mismo tiempo cambiando nuestras posturas corporales, podemos cambiar nuestros estados de ánimo.

Un ejemplo de cómo enfrentamos en mundo es la forma en que nos paramos y nos movemos.

Ahora si hablamos de emocionalidad, se sabe que cuando experimentamos un suceso inesperado se activa una emoción.

Existen circunstancias que las generan y las desencadenan, como la alegría, ira, miedo etc. Estas las definiríamos como identificables y definidas.

Por otra parte están las reactivas, las cuales son respuestas automáticas a acontecimientos inesperados.

Es importante lograr un reconocimiento de la relación entre la emoción, cuerpo, lenguaje y conocimiento, esto nos permitirá una interpretación determinada de los fenómenos emotivos, así como de las razones concretas de pensamiento y acción.

Ante estas evidencias podemos decir que podemos aprender a ganar con la relación lenguaje, cuerpo y emoción.

Una ventaja sería ejecutar una reconstrucción lingüística de nuestros estados de ánimo y emociones.

Dos podemos desarrollar y dominar nuestros tres dominios de acción lenguaje, cuerpo y emoción.

Tres ganaríamos dentro de un contexto familiar, empresarial, de negocios ya que al saber comunicarnos con otros correctamente no se verían afectados nuestros estados de ánimo.

De tal suerte que sabríamos como actuar proactivamente en el diseño de estados anímicos adecuados a nuestros propósitos personales.

Logrando con esto un éxito inmediato y duradero en todos nuestros procesos de relaciones, los cuáles se dan todos los días a todas horas, ya que como seres sociales, es imposible no interactuar.



miércoles, 5 de agosto de 2009

La firma y tu personalidad



Así es, tan sencillo como se lee: somos lo que firmamos.

Y aunque de forma consiente creamos que hicimos esa firma porque teníamos prisa, o porque no se nos ocurrió otra más en el momento, la realidad es que a nivel personal decidimos hacer esa firma por diferentes razones.

Para poder explicarles con más exactitud sobre las firmas les diré que La Grafología es una técnica proyectiva y descriptiva que analiza la escritura con el fin de identificar o describir la personalidad de un individuo e intentar determinar características generales del carácter, acerca de su equilibrio mental (e incluso fisiológico), la naturaleza de sus emociones, su tipo de inteligencia y aptitudes profesionales y, para algunos grafólogos, sirve para diagnosticar el grado de salud o enfermedad física y mental.

Así que como podrán darse cuenta no es cuestión de azar el cómo firmamos, la rúbrica está directamente ligada  con: nuestra vida, emociones, sentimientos, experiencias.

Aunque también es necesario decir que la firma se ve modificada con el paso del tiempo, y esto dependerá de nuestros estados de ánimo y circunstancias actuales.

Por lo cual si usted necesita reflejar dentro de su imagen pública poder, ponga mucha atención en cómo deberá empuñar su firma.

Dentro de muchas empresas existen asesores que estudian las firmas, estas son importantes en el momento de una contratación, hablará de la estabilidad emocional, el compromiso, hábitos y eficiencia, que usted podría tener o no para el puesto requerido.

En imagen nos basamos en el campo gráfico de Max Pulver, donde dividiremos en 4 vectores.

El vector situado a la izquierda indica percepción, es la representación de la figura de la madre, la regresión al vientre materno, el temor, la inhibición, la timidez, la represión, el egoísmo, el egocentrismo, la contemplación del pasado.

El vector situado a la derecha indica intuición, es la representación de la figura paterna, la proyección del porvenir, la extraversión, la creación, la proyección, la audacia, el coraje, la visión del futuro.

El vector situado hacia arriba indica pensamiento, la conciencia, el misticismo, la utopía, la espiritualidad, la religión, la exaltación, el idealismo, y la ambición de poder.

El vector situado hacia abajo indica sentimiento, las necesidades sexuales, la excitación, los goces, el inconsciente, las tendencias y deseos de lo material, la motricidad o trabajos del cuerpo con movimientos físicos.

Además de estos vectores, se analizan las zonas inferiores y superiores viendo cuáles son las que predominan. Las redondeces, las curvas, las agujas, los puntos etc.

De tal forma, que si usted necesita transmitir poder, éxito, seguridad, firmeza entre otras muchas cosas, deberá tener mucho cuidado en el diseño de su firma, esta podría delatarlo.

Los asesores de imagen, realizan cambios integrales, y la firma es un punto básico dentro de las consultorías. No olvide que la firma no engaña. A contrario habla de forma directa que nuestra persona.


El arte de la oratoria



Somos lo que comunicamos...

Hoy en día son pocos los que se salvan de un compromiso social, en donde se requiere conocer aunque sea de forma sucinta, la forma más correcta de expresarse.

Y es importante la forma de comunicarnos y expresarnos ya que de esto depende que nuestro mensaje sea bien percibido, ¿cuántas veces hemos querido decir algo y nuestro receptor entendió otra cosa? 

Le aseguro que esto le sucede a menudo.

Para empezar entre diferente genero, es impresionante lo diferentes que somos y cómo procesamos la información.

Así que para que no existan estos problemas de comunicación y expresión le mencionaré en este articulo lo más común y cotidiano en cuanto errores de oratoria y como podemos mejorarlos.

Empezaré por definirles oratoria: es el arte de informar, impactar, conmover y entretener por medio de la palabra.

Así que basándonos en este principio todos formamos parte de esta definición.

1. Existe una gran diferencia entre LO QUE SE DICE, y la manera en CÓMO SE DICE. Es muy importante saber decir las cosas, con nuestro cuerpo, rostro y por medio de la voz. Recuerden que la coherencia hará que el mensaje sea bien recibido, sea cual sea el contenido.


2. La dicción esta simple pero tan difícil tarea. La gente no está acostumbrada a articular bien las palabras, ya sea que se comen letras, barren las letras o simplemente pronuncian mal. Es inmediata la respuesta cuando un orador tiene estos problemas, normalmente la respuesta es negativa, y en consecuencia, el mensaje será poco creíble.


3. El tan conocido cantinflismo, cuántas personas dicen tanto sin decir nada. El buen orador tiene que tener un vocabulario amplio, y sobre todo ser preciso. La mayoría de las personas hablan y hablan de lo mismo sin dar ninguna información concisa y sin transmitir el mensaje. A estas personas les sugeriría leer más, para poder ampliar su vocabulario personal.


4. La confianza con la que decimos las cosas hará la máxima diferencia, la seguridad es un arma infalible, esto se reflejará en una atención inmediata y en una charla garantizada por usted.